miércoles, 30 de abril de 2008

Una amiga ha estudiado... - Jorge Riechmann

(Fernand Léger-Los constructores, 1950)



Una amiga ha estudiado teología;
trabaja como empleada de banco.

Un conocido ha estudiado ingeniería de
telecomunicaciones;
trabaja como pastor de ovejas.

La novia de un amigo ha estudiado magisterio;
no encuentra trabajo.

Exceso de seres humanos
con exceso de saberes humanos
cuando las exigencias ob-je-ti-vas son en
realidad tan sencillas.
La mano invisible aprieta pero no ahoga.

Vivimos
como es sabido
en el mejor de los mundos posibles, y por ende
también en el más racional.

Autor: Jorge Riechmann


(Fernand Léger-Constructores con la cuerda, 1950)

martes, 29 de abril de 2008

Autopsicografía - Fernando Pessoa

(René Magritte, La condición humana, 1935)


AUTOPSICOGRAFÍA

El poeta es un fingidor.
Finge tan completamente
que hasta finge que es dolor
el dolor que en verdad siente
Y, en el dolor que han leído,
a leer sus lectores vienen,
no los dos que él ha tenido
sino sólo el que no tienen.
Y así en la vida se mete,
distrayendo a la razón,
y gira, el tren de juguete
que se llama corazón.

Autor: Fernando Pessoa

lunes, 28 de abril de 2008

Combat d'amor - Pere Gimferrer

(Modest Cuixart, Criptis, 1990)


COMBAT D’AMOR

Em té l’amor tan subjecte al seu regne
que ara la nit m’és congost o planura;
erm, el boscam, tot d’incerta tenebra.
Temo la mort que les passes m’atura.

Qui, de l’amor, sin penyals i congestes
de cert coneix, i les balmes? Obscura,
la nit s’afua. Rocalles esquerpes,
fosques cruïlles de llamps i malura.

En creu l’amor em tenia i em té.
Sóc vianant que la creu no conjura.
Reto homenatge, en paratge foscant,
al viu punyal que l’amor em procura.

Més foc al pit, més foc al pit, més foc
al pit! L’amor fa patir si fulgura?
I el cel no pot, de tants núvols, obrir
un diamant, fosc de neu i sutzura?

Al pit, joiell conquerit! Sóc cabdill.
Tota la nit és la meva armadura.
Negre com sóc, ni la nit em reté.
És fosc ivori la meva figura.

L’amor té signes i emblemes. La nit:
astres glaçats en heràldica pura.
Mou un navili l’alè de l’espai.
Blau, sóc l’abisme, i l’abisme m’endura.
Ha de ser negre aquest blau. I demà,
tot fosc d’abisme, com eina madura
-la lluna als pàmpols, de mort averany-
del fosc imperí d’amor també cura.



COMBATE DE AMOR

Me tiene el amor tan sujeto a su reino
que ahora la noche me es desfiladero o llanura;
yermo, el boscaje, de incierta tiniebla.
Temo la muerte que mi paso detiene.

¿Quién, del amor, los peñascos y ventisqueros
sabe de cierto, y las grutas? Oscura,
la noche irrumpe. Roquedas adustas,
negras encrucijadas de rayos y condenación.

En cruz el amor me tenía y me tiene.
Soy viandante que la cruz no conjura.
Rindo homenaje, en paraje sombrío,
Al vivo puñal que el amor me procura.

¡Más fuego en el pecho, más fuego en el pecho, más fuego
en el pecho! El amor ¿hace sufrir si fulgura?
Y el cielo ¿no puede, entre tantas nubes, abrir
un diamante, oscuro de nieve y de carbón?

¡Al pecho, joyel conquistador! Soy adalid.
La noche entera será mi armadura.
Puesto que soy negro, ni la noche me retiene.
Es de sombrío marfil mi figura.

El amor tiene signos y emblemas. La noche:
astros helados en heráldica pura.
Mueve un navío el hálito del espacio.
Azul, soy abismo, y el abismo me sustenta.
Ha de ser negro este azul. Y mañana,
oscuro de abismo, como herramienta madura
-luz en las vides, agüero de muerte-
tomaré a mi cargo el oscuro imperio del amor.

Autor: Pere Gimferrer
Traducción: José Agustín Goytisolo

sábado, 26 de abril de 2008

Soneto gongorino... - Federico García Lorca

(Pablo Ruíz Picasso, La Paloma, 1949)


SONETO GONGORINO EN EL QUE EL POETA MANDA A SU AMOR UNA PALOMA


Este pichón del Turia que te mando,
de dulces ojos y de blanca pluma,
sobre laurel de Grecia vierte y suma
llama lenta de amor do estoy parando.

Su cándida virtud, su cuello blando,
en limo doble de caliente espuma,
con un temblor de escarcha, perla y bruma
la ausencia de tu boca está marcando.

Pasa la mano sobre su blancura
y verás qué nevada melodía
esparce en copos sobre tu hermosura.

Así mi corazón de noche y día,
preso en la cárcel del amor oscura,
llora sin verte su melancolía.


Autor: Federico García Lorca


Para la pesada de MÁngeles, como peaje para que me deje entrar en su blog…

jueves, 24 de abril de 2008

Nuevos poetas: TOROSALVAJE

(Carles Gabarró, Sin título (Colección Paisajes), 2002)


Mi amiga y asesora en temas “blogeriles”, MÁngeles, me recomendó que leyera las poesías de TOROSALVAJE; después de dar un paseo por el blog donde siembra sus poemas, he recogido un ramillete con algunas de las flores que han nacido de esa siembra que va realizando regularmente para inaugurar este nuevo capítulo dedicado a poetas anónimos, a esos poetas que todavía no son reconocidos públicamente pero que lo qué dicen y la forma cómo lo dicen me ha tocado de alguna manera.

En este país se podría decir que hay tantos poetas como habitantes, todos tenemos una vena literaria que nos da, en determinadas circunstancias, por ponernos a escribir en verso (yo tampoco me libro de ello y alguna que otra vez he hecho mis pinitos y he tratado componer algunos pseudos-poemas y pseudos-haikus, esto lo digo en voz queda ahora que no me oye nadie…). Las rimas libres nos permiten, además, no tener que complicarnos la vida con métricas y consonancias y cualquiera puede escribir un texto de una manera más o menos poética, utilizando con mayor o menor fortuna algunas metáforas u otras figuras retóricas. Otra cosa es que el fruto obtenido resulte medianamente legible y tenga la suficiente calidad para no considerarse algo más que un bodrio aderezado con unos cuantos ripios…

El criterio utilizado para la selección de los poemas en este nuevo apartado, será el mismo que estoy utilizando habitualmente en el blog, escogeré poemas que por cualquier razón, estética o de contenido, me digan alguna cosa. No me siento capacitada para juzgar si la poesía de tal o cual persona es de calidad, nada está más lejos de mi intención, simplemente me guiaré por mi intuición y por las emociones que la lectura de la misma me produzcan. Es mi deseo que quien entre a leerlos sienta unas emociones parecidas y disfrute con la lectura de lo que se vaya encontrando por aquí.


POESÍA
Necesito como el aire
la poesía que me aleja
del destino tatuado
la que me arranca
del molde para todo
de la alegría fingida
de los coros infames
de la vida etiquetada
necesito la poesía
para respirar cada día.


MIS PENAS
Mis penas son mudas
viven en mis ojos
allí nacen y mueren
en silencio resignado
después las entierro
húmedas y saladas
junto a sus hermanas
en mi nicho llorado
y así pena tras pena
me voy yendo despacio
de todo lo que yo quise
de todo lo que fue en vano.


CASI CIEGO
Tengo mil madrugadas
derramándose en mis ojos
una luna en la mirada
que rescatar no puedo
una campana de tinieblas
repicando en silencio
y un jardín de sombras
donde paseo casi ciego.


TU PIEL
Como un amanecer perpetuo
germinando de luz el ocaso
tu piel es caricia plateada
tu piel es deseo dorado
tu piel es pasión irisada
para mis enamoradas manos.

miércoles, 23 de abril de 2008

La oración de la rosa - Dulce María Loynaz

(Salvador Dalí, Rosa meditativa, 1958)


LA ORACIÓN DE LA ROSA

Padre nuestro que estás en la tierra; en la fuerte
y hermosa tierra;
en la tierra buena:

Santificado sea el nombre tuyo
que nadie sabe; que en ninguna forma
se atrevió a pronunciar este silencio
pequeño y delicado…, este
silencio que en el mundo
somos nosotras
las rosas…

Venga también a nos, las pequeñitas
y dulces flores de la tierra,
el tu Reino prometido…

Hágase tu voluntad, aunque ella
sea que nuestra vida sólo dure
lo que dura una tarde…

El sol nuestro de cada día, dánoslo
para el único día nuestro…

Perdona nuestras deudas
-la de la espina,
la del perfume cada vez más débil,
la de la miel que no alcanzó
para la sed de dos abejas…-,
así como nosotros perdonamos
a nuestros deudores los hombre,
que nos cortan, nos venden y nos llevan
a sus mentiras fúnebres,
a sus torpes o insulsas fiestas…

No nos dejes caer
nunca en la tentación de desear
la palabra vacía -¡el cascabel
de palabras!...-
ni el moverse de pies
apresurados,
ni el corazón oscuro de
los animales que se pudre…
Mas líbranos de todo mal.
Amén.

Autora: Dulce María Loynaz

martes, 22 de abril de 2008

Un hombre y una mujer - Juan Gelman

(Óscar Capristo, Abrazo)



UNA MUJER Y UN HOMBRE

Una mujer y un hombre llevados por la vida,
una mujer y un hombre cara a cara
habitan en la noche, desbordan por sus manos,
se oyen subir libres en la sombra,
sus cabezas descansan en una bella infancia
que ellos crearon juntos, plena de sol, de luz,
una mujer y un hombre atados por sus labios
llenan la noche lenta con toda su memoria,
una mujer y un hombre más bellos en el otro
ocupan su lugar en la tierra.


Autor: Juan Gelman


Juan Gelman ha sido el ganador de la edición de este año del Premio Cervantes.

lunes, 21 de abril de 2008

La tristeza - Susana March

(Fernando Botero, Mujer llorando, 1999)


LA TRISTEZA

No es el dolor de los amores incumplidos
ni los ideales deshechos.
No es tan siquiera la melancolía
de envejecer.
Es algo más tremendo y más grande,
algo que crece dentro de mÍ,
tal vez en el tuétano de los huesos
y que, acaso, se llame vida.
Porque vivir es triste:
vivir es una daga que se lleva clavada en la sangre.
Me duele abrir los ojos todas las mañanas
y encararme con las cosas que conozco y no entiendo.

Me duele dormirme todas las noches
y no haberme respondido a nada.
¡Porque nada tiene respuesta!
He dado un hijo al mundo
y este hijo me pesa en la conciencia,
porque lo he creado para la muerte y el dolor.
Sus jóvenes miembros perecerán un día,
se secará su risa
como las viejas fuentes de la montaña.
¡Un cuerpo tan hermoso, un corazón tan puro!

No puedo sentir conformidad.
Hay en mi corazón un rebelde brote que me aflige.
¡Llámense dichosos ellos! Yo no.
Cuando hundo el rostro entre las manos,
no lloro por un dolor concreto.
La voz humana no podrá consolarme jamás
porque ignora la palabra justa.
Tal vez Dios la pronunciará algún día. Dirá:
"Levántate".
Y yo ascenderé hasta el límite del hombre,
más allá de sus pasiones sencillas y bárbaras.
Ascenderé hasta el ángel y la estrella,
hasta la celeste sandalia del Creador.
Y sentiré en mi pecho la resurrección
de los antiguos privilegios humanos;
el privilegio de la ternura y de la paz,
de la piedad y de la alegría.
Porque yo sólo he contemplado en torno mío
odios y guerras fratricidas,
hipócritas mendigos que cubren sus harapos
con regios mantos de virtud,
niños hambrientos y descalzos,
prostitutas;
hombres enriquecidos en criminal comercio,
¡miseria en todas partes!
siglo amargo mi siglo para gozar del mundo,
amar la primavera,
vestir los blancos ropajes de la felicidad.
¡Un luto eterno bajo la piel!
Un luto eterno
para los que murieron torturados
en las guerras,
para los que perdieron sus hijos y su hogar,
para los desterrados y los tristes
que todavía no han hallado el camino del regreso.


Autora: Susana March

viernes, 18 de abril de 2008

Amor mío, mi amor, amor hallado... - Jaime Sabines

(Diego Rivera, Desnudo con alcatraces, 1944)


AMOR MÍO, MI AMOR, AMOR HALLADO...

Amor mío, mi amor, amor hallado
de pronto en la ostra de la muerte.
Quiero comer contigo, estar, amar contigo,
quiero tocarte, verte.

Te lo digo, lo dicen en mi cuerpo
los hilos de mi sangre acostumbrada,
lo dice este dolor y mis zapatos
y mi boca y mi almohada.

Te quiero, amor, amor absurdamente,
tontamente, perdido, iluminado,
soñando rosas e inventando estrellas
y diciéndote adiós yendo a tu lado.

Te quiero desde el poste de la esquina,
desde la alfombra de ese cuarto a solas,
en las sábanas tibias de tu cuerpo
donde se duerme un agua de amapolas.

Cabellera del aire desvelado,
río de noche, platanar oscuro,
colmena ciega, amor desenterrado,
voy a seguir tus pasos hacia arriba,
de tus pies a tu muslo y tu costado.

Autor: Jaime Sabines

jueves, 17 de abril de 2008

Poema XII, Luís Cernuda

(Henri Rousseau, La musa inspira al poeta, 1909)


XII

No es el amor quien muere,
somos nosotros mismos.

Inocencia primera
abolida en deseo.
Olvido de sí mismo en otro olvido,
ramas entrelazadas,
¿por qué vivir si desaparecéis un día?

Sólo vive quien mira
siempre ante sí los ojos de su aurora,
sólo vive quien besa
aquel cuerpo de ángel que el amor levantara.

Fantasmas de la pena
a lo lejos, los otros,
los que ese amor perdieron,
como un recuerdo en sueños,
recorriendo las tumbas
otro vacío estrechan.

Por allá van y gimen,
muertos en pie, vidas tras de la piedra,
golpeando impotencia,
arañando la sombra
con inútil ternura.

No, no es el amor quien muere.

Autor: Luís Cernuda
De “Donde habite el olvido” (1932-33)

miércoles, 16 de abril de 2008

Tot enyor de demà - Joan Salvat Papasseit

(Salvador Dalí, Cesta de pan)


TOT ENYOR DE DEMÀ

Ara que estic al llit
malalt,
estic força content.
--Demà m’aixecaré.........potser,
i heus aquí el que m’esperà:

Unes places lluentes de claror,
i unes tanques amb flors
sota el sol,
sota la lluna al vespre;
i la noia que porta la llet
que té un capet lleuger
i duu un devantalet
amb unes vores fetes amb puntes de coixí,
i una rialla fresca.

I encara aquell vailet que cridarà el diari,
I qui puja als tramvies
i els baixa
tot corrent.

I el carter
que si passa i no em deixa cap lletra m’angoixa
perquè no sé el secret
de les altres que porta.

I també l’aeroplà
que em farà aixecar el cap
el mateix que em cridés una veu al terrat.

I les dones del barri
matineres
qui travessen de pressa en direcció al mercat
amb sengles cistells grocs,
i retornen
que sobreïxen les cols,
i a vegades la carn,
i d’un altre cireres vermelles.

I desprès l’adroguer,
Que treu la torradora del cafè
i comença a rodar la maneta
i qui crida a les noies
i els hi diu: --Ja ho té tot?

I les noies somriuen
amb un somriure clar,
que és el baume que surt de l’esfera que ell volta.

I tota la quitxalla del veïnat
qui mourà tanta fressa perquè serà dijous
i no anirà a l’escola.

I els cavalls assenyats
i els carreters adormits
sota la vela en punxa
que dansa en el seguit de les roderes.

I el vi que de tants dies no he begut.

I el pa,
posat a taula.
I l’escudella rossa,
fumejant.

Tot això bé m’espera
si m’aixeco
demà.

Si no em puc aixecar
mai més,
heus aquí el que m’espera:

--Vosaltres restareu,
per veure el bo que és tot:
i la Vida
i la Mort.
Autor: Joan Salvat Papasseit


TODA LA NOSTALGIA DE MAÑANA

Ahora que estoy en cama
enfermo,
me noto muy contento.
--Mañana me levantaré quizás
y he aquí lo que me espera:

Unas plazas brillantes de luz,
y unas cercas con flores
bajo el sol,
bajo la luna, al ocaso;
y la chica que trae la leche
de cabecita loca
con su delantalito
de bordes rematados por encajes,
y con su risa fresca.

Y además aquel chico que voceará el diario,
que sube a los tranvías
y que los baja
en marcha

Y el cartero
que me angustia si pasa sin dejarme una carta
porque no sé el secreto
de las otras que lleva.

Y también el avión
que hará alzar mi cabeza
tal si desde un terrado me llamara una voz.

Y las mujeres del barrio
Madrugadoras,
que cruzan muy deprisa camino del mercado
con sus cestos pajizos
y vuelven
rebosantes de coles,
algunas veces carne,
y en otro, rojas cerezas.

Y después el tendero
que saca la tostadora de café
y empieza a darle vueltas al manubrio,
y que llama a las chicas
y les dice: --¿Ya lo tiene todo?

Y las chicas sonríen
son la clara sonrisa,
que es el olor que sale de la esfera que él mueve.

Y todos los niños de mi vecindario
que armarán mucho ruido porque ya será jueves
y no irán a la escuela.

Y los caballos dóciles
y los carreteros dormidos
bajo la lona en punta
que danza al recorrer las roderas.

Y el vino que hace días no he bebido

Y el pan,
puesto en la mesa.
Y el cocido rubio,
humeante.

Y vosotros amigos,
porque vendréis a verme
y nos miraremos, felices.

Todo eso me espera
si me levanto
mañana.

Si no me puedo levantar
nunca más,
he aquí lo que me espera:

--Vosotros quedaréis,
Para ver que todo es excelente;
y la Vida
y la Muerte.
Traducción: José Agustín Goytisolo

martes, 15 de abril de 2008

Nos encontramos y nos unimos... - Rabindranath Tagore

(Ana Graciela Fassi, Mujer y las Gaviotas)


"Nos encontramos y nos unimos
como las gaviotas y las olas.
Las gaviotas parten volando,
las olas siguen su camino
y también todos
tendremos que partir un día."
Autor: Rabindranath Tagore


M.J.O.M. in memoriam, 1961-2004

lunes, 14 de abril de 2008

Vientos del pueblo - Miguel Hernández

(Joan Miró, Aidez l'Espagne (El campesino catalán), 1937)

Hoy, 14 de abril, el poema no podía ser nada más que de Miguel Hernández, este “Vientos del Pueblo” que tantas veces me ha emocionado (hoy, al releerlo para traerlo aquí, una vez más). Y, a parte de por ser el día que es, en estos tiempos en que se empeñan en dividirnos todavía más en base a nacionalismos mal entendidos, pienso que este poema sigue teniendo una vigencia total…


VIENTOS DEL PUEBLO ME LLEVAN

Vientos del pueblo me llevan,
vientos del pueblo me arrastran,
me esparcen el corazón
y me aventan la garganta.

Los bueyes doblan la frente,
impotentemente mansa,
delante de los castigos:
los leones la levantan
y al mismo tiempo castigan
con su clamorosa zarpa.

No soy un de pueblo de bueyes,
que soy de un pueblo que embargan
yacimientos de leones,
desfiladeros de águilas
y cordilleras de toros
con el orgullo en el asta.

Nunca medraron los bueyes
en los páramos de España.

¿Quién habló de echar un yugo
sobre el cuello de esta raza?
¿Quién ha puesto al huracán
jamás ni yugos ni trabas,
ni quién al rayo detuvo
prisionero en una jaula?

Asturianos de braveza,
vascos de piedra blindada,
valencianos de alegría
y castellanos de alma,
labrados como la tierra
y airosos como las alas;
andaluces de relámpagos,
nacidos entre guitarras
y forjados en los yunques
torrenciales de las lágrimas;
extremeños de centeno,
gallegos de lluvia y calma,
catalanes de firmeza,
aragoneses de casta,
murcianos de dinamita
frutalmente propagada,
leoneses, navarros, dueños
del hambre, el sudor y el hacha,
reyes de la minería,
señores de la labranza,
hombres que entre las raíces,
como raíces gallardas,
vais de la vida a la muerte,
vais de la nada a la nada:
yugos os quieren poner
gentes de la hierba mala,
yugos que habéis de dejar
rotos sobre sus espaldas.

Crepúsculo de los bueyes
está despuntando el alba.

Los bueyes mueren vestidos
de humildad y olor de cuadra;
las águilas, los leones
y los toros de arrogancia,
y detrás de ellos, el cielo
ni se enturbia, ni se acaba.
La agonía de los bueyes
tiene pequeña la cara,
la del animal varón
toda la creación agranda.

Si me muero, que me muera
con la cabeza muy alta.
Muerto y veinte veces muerto,
la boca contra la grama,
tendré apretados los dientes
y decidida la barba.

Cantando espero a la muerte,
que hay ruiseñores que cantan
encima de los fusiles
y en medio de las batallas.


Autor: Miguel Hernández
De: Viento del pueblo (1936-1937)

domingo, 13 de abril de 2008

El puente de las tetas - Rafael Alberti


´

(Tintoretto, La mujer que descubre el seno, 1570)




MÁngeles se ha quejado hoy, con toda la razón del mundo, de la ausencia en estas páginas del poeta gaditano Rafael Alberti. Son todavía muchos los poetas que faltan, muchos más que los que están, muchos son también los días que quedan para ir coleccionando poemas en este álbum tan especial y, espero, ir añadiendo nuevos nombres, aunque, como siempre, es imposible que lleguen a estar todos los que son.

Así pues, en este domingo republicano, quede aquí el poema que MÁngeles nos ha regalado para compensar la ausencia, que no el olvido…




EL PUENTE DE LAS TETAS
(RECORDANDO DESDE ROMA)

Por el puente de las tetas
se asoman las venecianas.
Eran tetas, no manzanas,
las del puente de las tetas.

Bajo el puente de las tetas
yo miraba en la corriente
temblar las tetas del puente
de las tetas.

Sobre el puente de las tetas
las tetas ennochecían
y se desaparecían
por el puente de las tetas.

Sin el puente de las tetas
dormí y soñé dulcemente
que dormía sobre el puente
de las tetas.



Autor: Rafael Albertí


(Venecia, Ponte delle Tette)

sábado, 12 de abril de 2008

Rectificación a "Primero cogieron..."

El poema publicado el pasado 10.04.2008, no corresponde, como se cita, a Bertolt Bretch, sino que su autor es el pastor protestante, también alemán, Martín Niemöller. Un doble error, de memoria y de precipitación, llevaron a la publicación del mismo atribuyéndoselo a un autor equivocado. Mis más humildes excusas por dicho error injustificable y mi agradecimiento al Sr. Lúzbelguerrero por haberme ayudado a desvelarlo.

«…Su mejor y más conocido poema “Cuando los nazis vinieron...” trata acerca de las consecuencias de no ofrecer resistencia a las tiranías en los primeros intentos de establecerse. El orden exacto de los grupos y las palabras están sujetos a disputa, ya que existen muchas versiones, la mayoría transmitidas oralmente. Martín Niemöller, su autor, menciona que no se trataba originalmente de un poema, sino de un sermón en la Semana Santa de 1946 en Kaiserslautern, Alemania: “¿Qué hubiera dicho Jesucristo?”. Este poema se le atribuye erróneamente, en muchos idiomas, al dramaturgo y poeta alemán Bertolt Brecht

Original

Als die Nazis die Kommunisten holten,
habe ich geschwiegen;
ich war ja kein Kommunist.

Als sie die Sozialdemokraten einsperrten,
habe ich geschwiegen;
ich war ja kein Sozialdemokrat.

Als sie die Gewerkschafter holten,
habe ich nicht protestiert;
ich war ja kein Gewerkschafter.

Als sie die Juden holten,
habe ich nicht protestiert;
ich war ja kein Jude.

Als sie mich holten,
gab es keinen mehr, der protestieren konnte.


Traducción:

Cuando los nazis vinieron a llevarse a los comunistas,
guardé silencio,
porque yo no era comunista,

Cuando encarcelaron a los socialdemócratas,
guardé silencio,
porque yo no era socialdemócrata,

Cuando vinieron a buscar a los sindicalistas,
no protesté,
porque yo no era sindicalista,

Cuando vinieron a llevarse a los judíos,
no protesté,
porque yo no era judío,

Cuando vinieron a buscarme,
no había nadie más que pudiera protestar."


Fuente: Wikipedia

Greguerías - Ramón Gómez de la Serna

(Diego Rivera, Retrato de Ramón Gómez de la Serna, 1915)



GREGUERIAS


Escribir es que le dejen a uno llorar y reír a solas.

Al caer la estrella se le corre un punto a la media de la noche.

Trueno: caída de un baúl por las escaleras del cielo.

Carterista: caballero de la mano en el pecho... de otro.

El cometa es una estrella a la que se le ha deshecho el moño.

La B es el ama de cría del alfabeto.

Los tornillos son clavos peinados con la raya al medio.

El amor nace del deseo repentino de hacer eterno lo pasajero.

La ametralladora suena a máquina de escribir de la muerte.

La lagartija es el broche de las tapias.

Los recuerdos encogen como las camisetas.

La felicidad consiste en ser un desgraciado que se sienta feliz.

Aburrirse es besar a la muerte.

Sobre las hojas grises de los olivos gravita aún el polvo que levantaron los carros romanos y las diligencias.

Los monos no encanecen porque no piensan.

El agua se suelta el pelo en las cascadas.

El niño intenta extraerse las ideas por la nariz.

El desierto se peina con peine de viento; la playa con peine de agua.

En la noche helada cicatrizan todos los charcos.

El saltamontes es una espiga escapada que ha comenzado a dar brincos.

El escritor quiere escribir su mentira y escribe su verdad.

Me movía y hacía gestos frente al espejo, pero me reflejaba inmóvil. ¡El espejo se había quedado paralítico!

No se deben dejar las tijeras abiertas porque así podrán cortar el hilo del destino.

El libro es el salvavidas de la soledad.

La muerte es hereditaria.

El perfume es el eco de las flores.

El libro es un pájaro con más de cien alas para volar.

Los que matan a una mujer y después se suicidan debían variar el sistema: suicidarse antes y matarla después.

La prisa es lo que nos lleva a la muerte.

En cada día amanece todo el tiempo.

No importa que nuestro vaso sea pequeño, pues lo importante es que la botella esté llena.

A un mentiroso sólo lo cura un sordo.

La timidez es como un traje mal hecho.

El cerebro es un paquete de ideas arrugadas que llevamos en la cabeza.

A cada disparo recula el cañón, como asustado por lo que acaba de hacer.




Autor: Ramón Gómez de la Serna







viernes, 11 de abril de 2008

Táctica y estrategia - Mario Benedetti

(Guillermo Pérez Villalta, Tropicana, 1996)



TÁCTICA Y ESTRATEGIA

Mi táctica es mirarte
aprender como sos
quererte como sos.

Mi táctica es hablarte
y escucharte
construir con palabras
un puente indestructible.

Mi táctica es
quedarme en tu recuerdo
no sé cómo
ni sé con qué pretexto
pero quedarme en vos.

Mi táctica es ser franco
y saber que sos franca
y que no nos vendamos simulacros
para que entre los dos
no haya telón ni abismos.

Mi estrategia es en cambio
más profunda y más simple.

Mi estrategia es que un día cualquiera
no sé cómo
ni sé con qué pretexto
por fin
me necesites.


Autor: Mario Benedetti

jueves, 10 de abril de 2008

Primero cogieron... - Bertolt Brecht

(Rafael Canogar, El arresto, 1972)


PRIMERO COGIERON...

Primero cogieron a los comunistas,
y yo no dije nada por que yo no era un comunista.
Luego se llevaron a los judíos,
y no dije nada porque yo no era un judío.
Luego vinieron por los obreros,
y no dije nada porque no era ni obrero ni sindicalista.
Luego se metieron con los católicos,
y no dije nada porque yo era protestante.
Y cuando finalmente vinieron por mí,
no quedaba nadie para protestar.


Autor: Bertolt Brecht

martes, 8 de abril de 2008

Para mi corazón basta tu pecho - Pablo Neruda

(Marc Chagall, Lovers in Pink, 1916)


PARA MI CORAZÓN BASTA TU PECHO

Para mi corazón basta tu pecho,
para tu libertad bastan mis alas.
Desde mi boca llegará hasta el cielo
lo que estaba dormido sobre tu alma.

Es en ti la ilusión de cada día.
Llegas como el rocío a las corolas.
Socavas el horizonte con tu ausencia.
Eternamente en fuga como la ola.

He dicho que cantabas en el viento
como los pinos y como los mástiles.
Como ellos eres alta y taciturna.
Y entristeces de pronto, como un viaje.

Acogedora como un viejo camino.
Te pueblan ecos y voces nostálgicas.
Yo desperté y a veces emigran y huyen
pájaros que dormían en tu alma.

Autor: Pablo Neruda

lunes, 7 de abril de 2008

En abril, las aguas mil - Antonio Machado

(Ricardo Asensio, Día lluvioso, 1965)


EN ABRIL, LAS AGUAS MIL

Son de abril las aguas mil.
Sopla el viento achubascado,
entre nublado y nublado
hay trozos de cielo añil.
Agua y sol. El iris brilla.
En una nube lejana,
Zigzaguea
una centella amarilla.
La lluvia da en la ventana
y el cristal repiqueteo.
A través de la neblina
que forma la lluvia fina,
se divisa un prado verde,
y un encinar se esfumina,
y una sierra gris se pierde.
Los hilos del aguacero
sesgan las nacientes frondas,
y agitan las turbias ondas
en el remanso del Duero.
Lloviendo está en los habares
y en las pardas sementeras;
hay sol en los encinares,
charcos por las carreteras.
Lluvia y sol. Ya se oscurece
el campo, ya se ilumina;
allí un cerro desparece,
allá surge una colina.
Ya son claros, ya sombríos
los dispersos caseríos,
los lejanos torreones.
Hacia la sierra plomiza
van rodando en pelotones
nubes de guata y ceniza.

Autor: Antonio Machado


Estamos en una época de sequia, las reservas de agua están bajo mínimos y la situación es crítica. Este invierno no ha nevado, ha llegado la primavera y no habrá deshielo. La primavera también está siendo seca... Miramos al cielo pidiendo el bien bendito del agua...

domingo, 6 de abril de 2008

No sé estimar-te... - Maria Mercè Marçal

(Frida Kahlo, Diego en mi pensamiento (Frida de Tehuana), 1943)


NO SÉ ESTIMAR-TE…

No sé estimar-te sense el feix
d’ombra que em fa gep a l’esquena
-com la deixalla més obscena
a contrallum del cant que neix.

No sé estimar-te sense el pes,
pes mort que llasta barca i ombra
-com l’ala estèril del pesombre
a contrallei del somni tes.

No sé estimar-te sense mort:
salpa l’amor, foll com un rei
que, enverinat, cerqués remei
que l’alta nit i fora port.

A contra-llum, a contra-llei
no sé estimar-te sense mort.

Autora: Maria Mercè Marçal
(Desglaç, 1988)


NO SÉ QUERERTE…

No sé quererte sin el fardo
de sombra que mi espalda ha deformado
-como los desperdicios más obscenos
a contraluz del canto que ahora nace.

No sé quererte sin el peso,
peso muerto que lastra barca y sombra
-como el ala baldía del delirio
a contra-ley del angustioso sueño.

No sé quererte sin la muerte:
zarpa el amor, demente como un rey
que, envenenado, busca su remedio
en alta mar y en plena noche.

A contra-luz, a contra-ley
no sé quererte sin la muerte.

Traducción: Clara Curell

sábado, 5 de abril de 2008

Por rincones de ayer - José A. Goytisolo

(José Manuel Broto, Vestigia Vitae B-I, 1990)


POR RINCONES DE AYER

En lugares perdidos
contra toda esperanza
te buscaba.

En ciudades sin nombre
por rincones de ayer
te busqué.

En horas miserables
entre la sombra amarga
te buscaba.

Y cuando el desaliento
me pedía volver
te encontré.


Autor: José Agustín Goytisolo

viernes, 4 de abril de 2008

Un mar de lágrimas - Carlos Marzal

(Emilio Bonet Casanova, El adiós III, 1980)


UN MAR DE LÁGRIMAS

Sufrirás. Ya has sufrido.
Tal vez estés sufriendo.
Y aunque sepas por qué (si es que lo sabes),
ese conocimiento no será tu consuelo.

El adiós a los tuyos; el azar,
implacable; la incógnita del cielo,
todo lo que se pierde
hechos y vida abajo, tiempo abajo,
o también vida arriba, hacia lo que te espera,
todo, configura el sabor de tus lágrimas,
un sabor sin sabor, ya que no lo comparte
quien te ha visto sufrir
-no puede compartirlo-,
un sabor que no entiendes,
un cúmulo de lágrimas que trazan,
no sé dónde,
un mar por el que bogan,
y no sé para qué,
inútiles por siempre, inconsolables,
quién sabe desde cuándo,
su alma,
tu alma
y la mía.

Autor: Carlos Marzal
"Los países nocturnos", 1996

jueves, 3 de abril de 2008

¿Quién va allí? - Walt Whitman

(Wassily Kandinsky, Pequeñas alegrías, 1913)


¿QUIÉN VA ALLÍ?

¿Quién va allí?
Grosero, hambriento, místico, desnudo... ¿quién es aquél?
¿No es extraño que yo saque mis fuerzas de la carne del buey?
Pero ¿qué es el hombre en realidad?
¿Qué soy yo?
¿Qué eres tú?

Cuanto yo señale como mío,
Debes tú señalarlo como tuyo,
Porque si no pierdes el tiempo escuchando mis palabras.
Cuando el tiempo pasa vacío y la tierra no es más que cieno y
podredumbre,
no me puedo parar a llorar.
Los gemidos y las plegarias adobadas con polvo para los inválidos;
y la conformidad para los parientes lejanos.
Yo no me someto.
Dentro y fuera de mi casa me pongo el sombrero como me da la gana.

¿Por qué he de rezar?
¿Por qué he de inclinarme y suplicar?

Después de escudriñar en los estratos,
después de consultar a los sabios,
de analizar y precisar
y de calcular atentamente,
he visto que lo mejor de mi ser está agarrado de mis huesos.

Soy fuerte y sano.
Por mi fluyen sin cesar todas las cosas del universo.
Todo se ha escrito para mi.
y yo tengo que descifrar el significado oculto de las escrituras.

Soy inmortal.
Sé que la órbita que escribo no puede medirse con el compás de un carpintero,
y que no desapareceré como el círculo de fuego que traza un niño en la noche con un carbón encendido.
Soy sagrado.
Y no torturo mi espíritu ni para defenderme ni para que me comprendan.
Las leyes elementales no piden perdón.
(Y, después de todo, no soy mas orgulloso que los cimientos desde los cuales se levanta mi casa.)

Así como soy existo. ¡Miradme!
Esto es bastante.
Si nadie me ve, no me importa,
y si todos me ven, no me importa tampoco.
Un mundo me ve,
el más grande de todos los mundos: Yo.
Si llego a mi destino ahora mismo,
lo aceptaré con alegría,
y si no llego hasta que transcurran diez millones de siglos, esperaré...
esperaré alegremente también.
Mi pie está empotrado y enraizado sobre granito
y me río de lo que tu llamas disolución
porque conozco la amplitud del tiempo.


Autor: Walt Whitman

martes, 1 de abril de 2008

Rayuela, Capítulo 7 - Julio Cortázar

(Gustav Klimt - El beso, 1907-1908)


RAYUELA, Capítulo 7

Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca,
voy dibujándola como si saliera de mi mano,
como si por primera vez tu boca se entreabriera,
y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar,
hago nacer cada vez la boca que deseo,
la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara,
una boca elegida entre todas,
con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano por tu cara,
y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por
debajo de la que mi mano te dibuja.

Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope,
nos miramos cada vez más de cerca y nuestros ojos se agrandan,
se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran,
respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes,
jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene
con un perfume viejo y un silencio.

Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo,
acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos
como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces,
de movimientos vivos, de fragancia oscura.

Y si nos mordemos el dolor es dulce,
y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento,
esa instantánea muerte es bella.

Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura,
y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua.

Autor: Julio Cortázar